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YO HOY NO CELEBRO



     Artículo publicado en el diario digital Almería 360 http://almeria360.com/principal-opinion/opinion/08032016_yo-hoy-no-celebro_139515.html


YO HOY NO CELEBRO

     ¿Perdón? ¿Hoy se celebra el día mundial de…la mujer trabajadora? ¿Y me tengo que alegrar? ¿Se lo ha dicho alguien a esas mujeres que recorren kilómetros a pie por un desierto con un cántaro en la cabeza en busca de agua que recogen de un pozo infesto y emponzoñado; a esas que llevan enormes cestos llenos de mercancías o piedras de alguna cantera; a esas que cosen y cosen y cosen en jornadas interminables las bonitas prendas que las demás trabajadoras llevamos puestas; a las que aran la tierra tirando del yunque con un bebé liado en un trapo a cuestas… ¿Les ha dicho alguien que hoy se celebra un homenaje que incluye a todas ellas? ¿Les reporta algún beneficio, un poco de aliento, un descanso, un respeto, un premio, un agradecimiento, mejora en su vida, derechos…? Si todas somos mujeres trabajadoras, invitémoslas a nuestra fiesta, que la fecha sea un motivo para llevar a cabo acciones directas y no una excusa más para salir de juerga…
     La verdad es que algunas veces no entiendo las reglas del juego, muevo las fichas y siempre pierdo. Yo hoy no celebro, yo soy mujer todos los días y trabajo, y lucho, y sufro por ello. No me conforma un eslogan, no me abandero con una etiqueta que se lleva el viento. Con qué facilidad se nos impone un título que más que alegrías conlleva sufrimiento. Si, si, ya se que las hay que triunfan en la vida y yo me alegro, pero no puedo dejar de pensar en el resto, en la dura realidad que nos rodea, que es al fin y al cabo lo que cuenta. Millones de mujeres en este planeta, sin nombres, silenciosas, que se levantan cada jornada, sin esperar aplausos, para trabajar porque hay que alimentar a un montón de bocas, que agrietarán sus manos y su existencia sin saber lo que es realizarse como ser humano libre,  que no saldrán a cenar con sus amigas para celebrar que es un día dedicado a ellas, que ignoran incluso que exista tal día.
     Alguna o alguno dirá que así se les hace visibles… ¿De verdad que alguien las ve? ¿De verdad que una manifestación, un logo, una pancarta, un póster, un brindis ante una mesa repleta, aquí, en el primer mundo, les hace justicia a las mujeres de Eritrea, Borneo, Guatemala, por ejemplo, como si de un efecto mariposa se tratara?
     A todas ellas no les impongan títulos ni medallas, ya se encargan ellas solas de imponérselas cada mañana.
     Y a mí, que un día al año se  dedique a la mujer trabajadora y ni siquiera sea de descanso, no me dice nada.



Ana Tomás García



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