Solo la noche ahuyenta sus penas
sucumbido al sopor de los sueños
su alma errabunda vaga serena
y perdido por esa nebulosa
de ensueños
libre de ataduras y cadenas
escapa de la desidia del preso
que sin estar en la cárcel
está en el mundo como en la trena
Ana Tomás García
No hay presidio que vivir con miedo, como dicen en Blade Runner. A veces el drama del preso no es la celda sino la ausencia. Todo un villancico de nuestros días.
ResponderEliminarUn saludo.
JM
El mundo es una enorme prisión de la que no somos conscientes.Saludos.
EliminarMuy inspirador, y como dice JM, parece un retrato actual de lo que quieren imponernos... orden, obediencia, silencio. Espero que Fantasía nunca sea atrapada por la Nada... Saludos!
ResponderEliminarEso jamás, mientras haya soñadores (como Bastian) que la hagan permanecer con vida... Atravesamos tiempos oscuros aunque parezcan palabras mayores. Besicos.
EliminarSólo en nuestro interior somos libres del todo.
ResponderEliminarPrecioso poema Ana.
Un beso
Afortunadamente nuestro interior es inaccesible y podemos darle rienda suelta sin que nadie lo pueda censurar... Gracias María.
EliminarTodos somos un poco presos de nosotros mismos, o de nuestro cuerpo.
ResponderEliminarUn poema de gran fuerza.
Un abrazo (vengo de Esta noche te cuento)
Hola Asun, gracias por abrir mi maleta, aquí está para que eches un vistazo cuando quieras.
EliminarSí, las formas de presidio son inimaginables, extensas, incontables... Un beso.
Hola Ana, no hay mayor prisión que de aquél que no quiere buscar su libertad. Tu poema es la máxima expresión de ese pensamiento. Muy bello.
ResponderEliminarUn abrazo
Rosa
Agradezco tus visitas al blog.
Gracias Rosa, agradecida estoy yo de que rebusques en mi maleta, ya sabes que la tengo siempre abierta... Un abrazo.
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